Después de anunciar que el anime de One Piece se iba a pasar seis meses en un hiato para poder hacer bien la próxima saga, ahora le ha llegado el turno al manga. Y es que Eiichiro Oda, después de dejar a los lectores con un cliffhanger que llevaban esperando desde hace años (sin spoilers), pausará la publicación durante dos semanas en las que los seguidores van a estar subiéndose por las paredes, a medida que se va adentrando, poco a poco, en el trayecto final.
¡Vamos a navegar (en el descanso)!
Hay un buen motivo por el que Oda ha decidido dejar su manga de lado, y no es que haya decidido irse de vacaciones (más que merecidas, por otro lado), sino acudir a Netflix para preparar la segunda temporada de la serie en acción real. Así, será el 11 de noviembre cuando aparezca el capítulo 1131 que continúe las aventuras de la tripulación en Elbaf.
De hecho, Shueisha creía que este descanso sería para que el autor descansara, pero en su lugar ha decidido seguir trabajando. ¿Sano? En absoluto, pero al borde de los últimos años de One Piece, es probable que quiera darlo todo para después descansar con sus millones el resto de su vida. Después de darnos una de las piezas más potentes de la historia de la cultura pop, ¿quién puede culparle?
